(Photo © : Niños de Angola, diócesis de Benguela, 2019)
La misión de los Agustinos de la Asunción es trabajar por la llegada del Reino de Dios a la sociedad actual. Manuel d'Alzon quería religiosos sensibles a las grandes causas del hombre y de Dios. Durante su vida, nos impulsó en nuevas direcciones para la época: presencia en países ortodoxos, musulmanes, peregrinaciones, periodismo, seminarios para los pobres. Nuestras actividades actuales son el resultado de esta herencia y de innovaciones que son respuestas a nuevas necesidades y a un nuevo contexto.
Desde 1845, las actividades de los asuncionistas han sido numerosas. Para trabajar por la llegada del Reino de Cristo, nuestra Regla de Vida especifica que todas nuestras actividades deben estar "animadas por un espíritu doctrinal, social y ecuménico". Para ser fieles a este espíritu y responder a las necesidades de la Iglesia y del mundo, los asuncionistas estamos presentes y somos creativos en muchos sectores de la vida social: en la prensa, en la enseñanza, en las relaciones ecuménicas, en los compromisos sociales, en las peregrinaciones, en las parroquias... Nuestra familia religiosa trabaja al servicio de un Reino sin fronteras, en Europa, África, Asia y Oceanía, en América del Norte y del Sur... Nuestras comunidades en todo el mundo reúnen a religiosos de diferentes nacionalidades y culturas.
El carisma asuncionista sigue vivo y se expande con sus ultimas fundaciones en Angola y Costa de Marfil.
En el año 2021 también se fundó un segundo polo misionero en Texas, en la ciudad de El Paso, Estados Unidos, no muy lejos de la frontera con México. Esta ciudad se caracteriza por una gran afluencia de inmigrantes mexicanos. Una comunidad formada por estadounidenses, filipinos y mexicanos a cargo de un santuario y de la atención pastoral de los inmigrantes. Esta comunidad es internacional, como la mayoría de nuestras comunidades actuales, porque son un signo de fraternidad universal y una manifestación del Reino de Dios.
Hay otras fundaciones previstas, aún no programadas claramente, pero que también forman parte de nuestra ambición misionera: en Ghana, país de habla inglesa.
En Asia, ya estamos presentes en Vietnam, Filipinas y Corea, pero pensamos que sería importante ampliar nuestra presencia más allá de estos países, quizás yendo a Indonesia, este gran archipiélago de fuerte mayoría musulmana pero donde hay una minoría cristiana muy activa y donde ya tenemos algunas vocaciones que vienen y se preparan en Filipinas.
La realidad de la Asunción es decididamente misionera y apostólica; trabajamos por la llegada del Reino de Dios y, como trabajadores del Reino, ésta es nuestra orientación prioritaria.